La técnica del “pincel seco” es de lo más versátil dentro de la pintura decorativa, permitiendo desde acabados rápidos rústicos campestres con sólo una brocha y dos colores, hasta sofisticadas terminaciones chic de varios tonos superpuestos.
La técnica es muy sencilla: se carga un pincel o brocha con muy poca pintura, y arrastramos la pincelada peinando apenas la superficie de la madera. Se llama también arrastre de pintura. No se presiona el pincel sobre el mueble, sino que se desliza con mucha suavidad. Los resultados se ven al instante.
Básicamente existen dos tipos de acabados a pincel seco, dependiendo de la marca que deja la brocha sobre la superficie. Podemos trabajar muy rápido o pasar horas y horas…
Falso decapado
El primero de ellos puede recordarte al “decapado”, por el efecto veteado conseguido con los trazos de distintos colores alternados. Es el más vistoso por su movimiento y sus posibilidades a la hora de crear distintas texturas. Estas características hacen que sea ideal para dar un acabado que está muy de moda ahora: el envejecido o desgastado. Es muy útil cuando no se quiere decapar con lija, porque el efecto es como si se hubiera decapado, pero en realidad no se ha usado lijadora, sino pintura. Ideal sobre maderas crudas, porque saca la veta. Esta técnica de pincel seco la uso mucho para dar al mueble acabados de estilo vintage reciclado, rústico, industrial, boho, campestre, marino…
Superfície ensoñada
El segundo es más sutil, más discreto, ideal para pequeños trabajos, pero complicado para superficies grandes. Yo lo uso en maderas talladas de pequeñas piezas, como respaldos de sillas y butacas, copetes de muebles, mesitas auxiliares, puertas de muebles con molduras, marcos de cuadros…
Superponiendo tonos diferentes sin dejar rastro de brocha o pincel, se consigue romper con las terminaciones planas y dar un aspecto con “alma” ensoñado y etéreo. Pura magia por la profundidad que caracteriza a sus acabados con transparencia de colores: tres, cuatro… seis! Es ideal para dar un acabado gustaviano escandinavo, francés rococó o shabby chic anglosajón. Queda muy elegante y da un aspecto realmente antiguo con calidad artística a la pieza que estamos decorando. A mí me recuerda a la técnica de veladuras que uso cuando pinto obras al óleo.
Pintar a pincel seco garantiza rapidez y algo muy importante, acabado artístico artesano. Esta técnica es el resultado de un trabajo muy manual, subjetivo, único, “imperfecto”. Y es precisamente esta imperfección manual lo que hace que el mueble se convierta en una pieza única y exclusiva.
Además, es una técnica ideal para principiantes muy resultona que facilita disimular errores en el mueble, permite correcciones muy fácilmente con sólo repetir el proceso sobre manchas o pinceladas poco convincentes para equilibrar el resultado, volviendo a alternar los colores.
El pincel seco es ideal para rectificar color, oscurecer, aclarar tono, o dar movimiento a piezas ya pintadas. Y si buscas superficies “sufridas”, preparadas para aguantar mejor el uso cotidiano, te irá que ni pintada. Y como no, decora como pocas ya que es una técnica que luce mucho sobre muebles antiguos o rústicos.
Técnica de pincel seco: trucos básicos
Algunos trucos básicos técnicos que uso cuando realizo la técnica del “pincel seco” son:
- Cargar la punta de las cerdas con poca cantidad de pintura (de aquí viene el nombre de la técnica), descargando sobre el bote de pintura y sobre un trapo la cantidad sobrante, así me aseguro de que llevo poca pintura.
- Pintar el mueble con 1 o 2 capas de Pintura y después realizar el acabado a pincel seco. Otra opción para muebles con maderas nobles en muy buen estado es pintar la pieza entera directamente con pincel seco: por ejemplo, muebles estilo colonial.
- Utilizo brochas planas y con las cerdas bien secas, ya que de lo contrario se perderia la huella de la pincelada. Uso paletina de lacar y también brochas antiguas con cerdas endurecidas.
- Aplico siempre pinceladas muy suaves, con el pincel muy tumbado, sin presionar. Eso hace que la pintura se vaya depositando en todas las irregularidades de la madera y sacando por tanto la veta.
- empiezo pintando los bordes de fuera hacia dentro, haciendo el perímetro de cada superficie que estoy pintado. Una vez tengo una zona, cruzo la pincelada: si he pintado ligeramente hacía la izquierda, pinto por encima hacia la derecha. Si he dado el pincel seco en vertical, encima lo vuelvo a dar en horizontal: Esto crea unas superficies ensoñadas muy sugerentes.
- Alterno pasadas de distintos colores, dejando secar cada una de ellas antes de aplicar la siguiente. Juego con gamas de colores, o colores complementarios.
Si lo deseas, puedes aprender esta técnica y otras más participando en uno en mis workshops, cursos o talleres…
Ejemplos de muebles pintados con pincel seco:
Da para todo un curso las distintas finalidades y efectos del pincel seco. Es una de las técnicas que más me gustan. Sigo enamorada de estos muebles. Todos deberían tener su nombre propio, ya que los muebles son el medio que transporta el arte. Solo es una humilde opinión.
Muy buen tutorial. Muchas gracias por todas las explicaciones técnicas tan detalladas. Yo por experiencia recomiendo tus workshop para verte aplicarlas en directo.
Muchas gracias, Pilar, como siempre, por dedicar tu tiempo a leer el post, escribir la reseña, y venir a los workshops!!!
Muchas gracias Sara como siempre por tu dedicación, entusiasmo, tiempo y actividad incondicional de follower de Alicia Designart, como amiga, alumna y clienta!!!Besos y nos vemos en el siguiente workshop
Sólo he asistido a un taller pero me he dado cuenta que técnicas que creía que ya sabía en realidad, no las dominaba en absoluto. Todo un lujo aprender con Alicia. Vivo lejos (a casi 500 km!) pero pienso asistir siempre que pueda. Gracias por compartir tu sabiduría
Muchas gracias Cristina por tu comentario, la verdad es que para mí es un honor que vengas desde tan lejos! Gracias por tu comentario tan generoso!!
Un abrazote muy grande y seguimos en contacto por el grupo de wassap.
Alicia